Emmanuel Aguilar
Después de que se quemara de manera intencional el relleno sanitario, varias familias de ejidos como La Tijerita se vieron afectadas. Tal como ocurrió con el basurero de la copa, cientos familias resienten sus efectos.
María Guadalupe Chapa Salinas, integrante del 13vo Comité Campesino, señala que no hay quejas formales pero si la gente cercana a esos ejidos se vio afectada. “La Tijerita, Galaneño y Guadalupe con algunos de los que vieron el humo y de alguna manera sintieron la molestia de ese incendio”, manifiesta.
Señala que desde hace años los habitantes de comunidades cercanas han sentido ese miedo de que se incendie y les cause daños severos a su patrimonio. Esto porque no hay condiciones de seguridad que prevengan situaciones como las que ya ocurrieron.
En el centro de transferencia de la copa hace años que se tira basura y no se tiene vigilancia para evitar que alguien le prenda fuego, hace unos días puso en peligro de intoxicación a miles de personas.
Lo que ocurrió esta semana en el relleno sanitario fue solo un susto de lo que podría ocurrir más adelante si no se tiene cuidado. Es como una bomba de tiempo si las autoridades no le prestan atención no vigilan el lugar, finaliza diciendo.
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